Es considerada como la primera reserva de especies autóctonas de agua dulce del país. La finalidad de este proyecto tiene como objetivos finales la reproducción con el fin de preservar cada una de las especies observadas en el mismo en conjunto con generar una valoración por la existencia de estas mismas y desde luego, la difusión de las especies dulceacuícolas.
Dentro de este acuario se posee alrededor de sesenta especies y unos quinientos ejemplares de peces apartando de la sección de crustáceos, moluscos y plantas nativas de agua dulce, todo esto con la finalidad de brindar a la población la posibilidad de encontrar a través de la reserva la gran diversidad biológica que aún existe y de este modo valorizarla y protegerla a lo largo de los tiempos.
Desde luego, se buscan participantes que puedan ser convertidos en agentes de difusión y protección, convirtiéndose en una especie de guardianes de este sitio, teniendo una actitud más activa en defensa del agua, río y en especial de la vida existente en ellos.
Hoy en día se cuenta con cuarenta peceras de cuatrocientos en conjunto con el equipamiento debido para todas las actividades que se necesiten realizar para la preservación de las mismas, en estas peceras se albergan alrededor de seiscientos ejemplares de cincuenta especies distintas de animales provenientes del mar, se debe tener presente que la conciencia se genera a partir del primer grano de arena que se incorpora en un proyecto y poco a poco las personas comienzan a unirse.
